Castlevania: Lords of Shadows 2 viene para continuar donde la primera parte lo dejó. Con un Gabriel convertido en Dracula, príncipe de las tinieblas y todopoderoso señor de los vampiros. Harto de su inmortalidad, decide aceptar la oferta de su antiguo enemigo Zobek, la cual consiste en impedir el advenimiento de Satán en la Tierra a cambio de acabar con su longeva y aburrida vida.
Así da comienzo una de las mejores aventuras de los últimos meses, combinando con gran acierto exploración, acción desenfrenada y plataformas, todo envuelto por unos escenarios sublimes y llenos de detalle que harán que recorrerlos sea tan sorprendente como satisfactorio.
El desarrollo del juego no cambia demasiado respecto al de su antecesor, Gabriel, o Drácula, puede blandir su látigo con envidiable maestría para azotar a sus enemigos hasta la muerte, además de una espada y unos guanteletes de fuego. Estos últimos vienen a ser los sustitutos de las magias azul y roja del primer juego y sirven para lo mismo, al golpear con la espada recuperamos vida y si lo hacemos con los guanteletes, romperemos los escudos de nuestros enemigos. Sólo hay estas tres armas en el juego pero son suficientes para que se sienta variado, pues cada una de las tres tiene una lista bastante aceptable de técnicas para dominar. Así, cada vez que utilicemos una técnica, esta ganará experiencia y, cuando esté llena, ganará fuerza, por lo que el juego nos insta a ir variando nuestra forma de luchar.