Puede que el nombre de Resident Evil ya no signifique lo mismo que antes. Puede que el terror ya no lo provoquen sus deformes criaturas sino su desfigurada fórmula que, cual zombi, ha muerto y ha vuelto a la vida de una forma mucho más desgastada de lo que fue en su día.
Con REvelations, Capcom trató de introducir de nuevo los elementos de terror de las primeras entregas, pero sin renunciar a la acción que se empeñó en incluir desde la ya lejana cuarta parte.
Lo cierto es que REvelations no fue para nada un mal juego, sino todo lo contrario, y realmente recuperaba parte de la angustia de estar atrapado en un lugar cerrado y con escasos recursos, aunque pecaba de ser algo corto y de seguir centrándose demasiado en la acción en los niveles protagonizados por el bueno de Chris.
Ahora, tiempo después, Capcom vuelve a la carga con REvelations 2, aprovechando todo lo que funcionó en la primera parte y potenciándolo. Si bien es cierto que sigue siendo más de lo mismo y que vamos a pegar tiros como descosidos, pero ahora nos encontramos con escenarios muy oscuros y lúgubres, angustiosos y llenos de detalles macabros, al más puro estilo Silent Hill.
De nuevo nos encontramos con doble pareja de protagonistas que se irán intercalando, de forma que jugaremos primero con Claire y Moira y luego seis meses después de los hechos, con Barry y Natalia.