Con la llegada de PS4 a mi colección también llega al blog las correspondientes reseñas de sus juegos, al menos de los que poseo actualmente. Knack es un título que no siempre captó mi atención y, de hecho, la primera vez que lo vi me pareció un juego irrelevante y que no merecía mi atención. Incluso un buen amigo me lo recomendó aunque yo no tardé en asegurar que nunca iba a comparar dicho juego. Pero si algo he aprendido en todos los años que llevo como videojugador es que nunca hay que decir nunca, y Knack es uno de los mayores ejemplos que puedo recordar.
Ni las primeras imágenes ni los primeros gameplays me convencían pero aun así lo compré, y el motivo es que también vi un trailer en el que se veía cómo eran los vídeos del juego. Y ahí sí que me cautivó. Personajes carismáticos y un estilo que recordaba a la mejor Pixar hicieron que mi interés por el juego se disparase. Así que, cuando puse el juego en mi PS4, tenía algo de miedo de que mis ganas de probar cosas nuevas y el hecho de ser un juego exclusivo me hubiesen llevado a comprar un título que no me iba a dar la diversión que esperaba. Nada más lejos de la realidad. Knack es un personaje creado a partir de reliquias para formar un monstruo humanoide. Puede saltar, golpear con sus puños y, lo más importante, absorber piedras de elementos, como hielo o metal para hacerse más grande y ganar protecion extra.
Si bien es cierto que Knack no cumple del todo con lo que esperamos de un buen juego de plataformas. Es simple y extremadamente sencillo en cuanto al desarrollo. Es como jugar a un juego de los de antes pero con gráficos a la última. Y digo de los de antes porque conserva parte de su dificultad, pues incluso en "fácil" nos matarán de dos golpes y deberemos agudizar nuestros reflejos si no queremos morir una y otra vez. Pero hay que decir que el juego es extremadamente generoso con los check points así que aunque no paremos de morir, siempre apareceremos justo al lado. Eso es bueno porque cuando te matan en un juego y tienes la adrenalina a tope, quieres otro intento en el acto y Knack te lo da, pero también es malo porque esto le da al juego una sensación de sencillez demasiado grande.
Los gráficos del juego tampoco son algo fuera de lo común y quizá sería posible reproducirlo en una PS3 o en una WiiU, pero cuenta con una ventaja. Gracias a la potencia extra de PS4 las texturas son ultra definidas y, gracias al acertado uso de la paleta de colores, parece que algunos escenarios sean casi reales y que Knack sea un realista muñeco de plástico que se mueve por ellos. La belleza del juego me encandiló de principio a fin. Y si el apartado técnico está a la altura, la historia también acompaña. Es cierto que no es revolucionaria y que quizá sea predecible en algún momento, pero el carisma de los personajes y algunos puntos durante el desarrollo hacen que nos encariñemos con ellos y que sigamos hasta el final.
Puede que Knack no sea un juego perfecto y, para ser honestos, está muy lejos de ello. Pero lo que hace, lo hace bien, y la sensación de estar jugando a un juego clásico pero moderno al mismo tiempo está ahí. Tampoco me atrevería a recomendar la compra de PS4 sólo por Knack, pero si ya la tienes y te gustan las plataformas, entonces no deberías perderte éste original título. Seguro no vas a olvidarte de sus personajes en mucho tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario